sábado, 31 de diciembre de 2011

el veinticinco


En el espíritu de año nuevo y el fin el año dos mil once, quiero compartir unas fotos.  Todo parecía una noche normal, pero cambio en un instante.  El resultado, una noche inolvidable.  Entre risas y asombro por la tranquilidad y atmósfera del lugar festejamos el cumpleaños.  Cabe mencionar que una de las cosas que mas tesoro en esta vida son las amistades.  No cabe duda que Dios me ha bendecido con tales.